Cada vez más vemos cómo surgen alternativas a los campamentos "campestres" de verano. Otras opciones para que los más pequeños se liberen de la rutina del invierno, pero a su vez sigan aprendiendo y disfrutando a la vez. En esta ocasión os quiero enseñar las propuestas de centros que cada vez tienen más aceptación, en ambos casos relacionados con la cultura y el patrimonio.
Museo en verano - Museo Thyssen
Bajo el lema "Jugar con los cuadros" participantes de entre 6 y 15 años descubrirán el apasionante mundo del arte.
Aprender jugando, creando juguetes o escenografías inspiradas en los cuadros del museo.
Desde su página web nos explican:
"Los escenarios y personajes, nos invitarán a crear historias que cobrarán vida y espacio propio. Esta actividad acerca a los participantes a las colecciones del Museo a través de una experiencia colectiva y creativa donde exploraremos materiales con la idea del juego, la narrativa y la experimentación plástica."
Foto: Museo Thyssen
Biblioteca Nacional
Actividades para niños de entre 5 y 12 años, en las que investigarán sobre el libro, la lectura o la biblioteca como elemento conservador del conocimiento.
Desde el programa del campamento nos hacen saber:
"Os aseguramos que NADIE extrañará la playa, porque estas vacaciones en el Museo serán como una montaña rusa, acelerando la imaginación de los niños, conociendo nuestra historia y desvelando nuevas historias"
El tema principal durante las dos semanas es "El Quijote" que conocerán a través de un viaje en el tiempo, desde el pasado hasta el futuro. El objetivo final será la publicación de una web serie realizada por todos los participantes, los verdaderos protagonistas de este peculiar campamento en el que también dejarán sus opiniones en las redes sociales.
Toda la información aquí.
Imagen: Biblioteca Nacional
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